
Después de una semana de conmoción general y de ver todo lo que queda aún por hacer no podemos más que seguir apoyando y sembrando buentrato.
La magnitud de la catástrofe vivida la semana pasada en Valencia y Teruel nos hace reflexionar sobre la comunidad y el cómo es esa comunidad la que, dejando colores a un lado, se pone en pie para ayudar a sus semejantes.
El pueblo salva al pueblo es el lema más compartido en esta semana y cuando miramos las fotografías y vídeos que circulan al respecto nuestro corazón se hincha de orgullo por tantas y tantas personas que acudieron enseguida a socorrer a quienes lo habían perdido todo.
No vamos a mirar hacia las instituciones porque creo que cada vez nos representan menos…
Lo importante es seguir apoyando en la medida en la que podamos para que esto no sea un episodio más que caiga en el olvido en unas semanas hipnotizadas por las luces navideñas, que por cierto y con muy mal gusto, ya estaban colocando en Valencia esta semana.
Podemos contribuir de muchas maneras, pero lo importante es hacerlo por los cauces oficiales, primero porque tienen más herramientas y recursos y también porque si vamos a lo particular unas personas ganan y otras pierden. Lo que cada cual aporte irá acorde con lo que pueda buenamente. Todo cuenta.
Puedes donar desde lo material: comida, ropa, enseres…o dinero. Para ello te dejo varias opciones y cuentas en las que puedes entrar a informarte:

También hay toda una red de ayuda y apoyo a nuestros animales de compañía, esos que para muchas personas son su única familia y apoyo y que se han perdido o han desaparecido tras la riada. Aquí también hay una gran cantidad de protectoras que se han visto inundadas y que buscan ayuda, tanto para acoger mientras vuelven a recuperarse como en ayudas para comida y enseres.

Todo cuenta y nada es poco a la hora de ayudar.
Esto es sólo el principio, lo urgente, la primera línea. Después vendrá toda la línea de apoyo a la salud mental que ya está preparada con muchas asociaciones y colegios de psicología y terapeutas dispuestos a ayudar. Lo importante es no olvidarnos de que esto va para largo, que no sólo hay que prestar ayuda a las víctimas, que también habrá parte de esos voluntarios que la necesiten por todo lo que han visto y sufrido estos días.
Y no se nos olvide una parte importante como es cuidarnos para cuidar. Algo tan crucial y tan de raíz en nuestros talleres como bientratarnos e implicarnos sin poner nuestra salud en riesgo. Para ello tenemos herramientas y recursos como explicamos en nuestro botiquín de emergencias. Caer enfermas por ayudar es sumar más en la parte de la balanza que ahora tanto necesita esa ayuda.
Todas esas personas que lo han perdido todo están en nuestros corazones y con ellas también todas las que están poniendo de su parte para que esto sea más pasable.
